Hemos comenzado recientemente a trabajar en el concurso de licitación de las Obras de consolidación y recuperación del Castillo de Almansa en la provincia de Albacete. Es un honor participar en el estudio de obra de esta intervención ya que la fortaleza almanseña es sin duda el ejemplo de arquitectura defensiva que mejor se ha conservado de la provincia, una de las siluetas popularmente más reconocidas de Castilla-La Mancha y uno de los monumentos de su tipo más hermosos de la Península.
Aún no lo hemos visitado y, sin embargo, ya hemos bebido de todo tipo de fuentes para informarnos y documentarnos. Posiblemente sea éste uno de esos procesos de licitación en los que la visita está tan cercana al día de la entrega que, tras una semana de intenso estudio, va a haber que intensificar muchísimo la producción en los últimos días; siempre es así pero en esta ocasión un poco más. La visita organizada -supuestamente con los redactores del Proyecto y el personal del Ayuntamiento de Almansa- será el próximo jueves día 3 de marzo, aunque no tenemos información fidedigna acerca de si finalmente la visita será guiada o será otra jornada de puertas abiertas puesto que, hasta donde conocemos, todas las zonas en las que se actuará son visitables.
El Castillo de Almansa es un edificio absolutamente singular en el que la orografía del Cerro del Águila y la arquitectura que sobre él se asienta no son la una sin la otra. Tras haber estudiado preliminarmente los cambios acontecidos desde la etapa hispanomusulmana -concretamente almohade- hasta la mitad del siglo XX, estamos asombrados de cómo las diferentes estructuras militares han ido transformándose a lo largo del tiempo pero sin que la fortaleza perdiera belleza e intensidad. Aunque una bala de cañón o una cubeta de cemento pueden ser igual de destructivas, no es facil para un ser humano de no importa qué época sojuzgar la impronta de este imponente monumento.
La alcazaba primigenia -originalmente de planta rectangular, muros de tapial calicostrado, merlones rectangulares y aspecto blanquecino- posiblemente fuese el más hermoso. Su decadencia funcional y las sucesivas reformas del Infante Juan Manuel en el siglo XIV y del Marqués de Villena un siglo después lo transformarían en el castillo deteriorado y ruinoso que se reconstruyó de los años 50 en adelante. Aquella obra debió ser impresionante pero sólo se limitó a reconstruir lo que se suponía que fue la fortaleza en su época de mayor esplendor.
El de la imagen superior es el aspecto que presentaba el Castillo de Almansa en algún momento antes de las intervenciones mencionadas que se desarrollaron entre 1953 y 1972. Debemos recordar que en 1911 fue solicitada la demolición total del mismo por parte del Ayuntamiento y ante el desconocimiento acerca de la mejor opción, el gobernador civil se vio obligado a prohibir el uso de la extracción de piedra del Cerro del Águila al menos hasta obtener una respuesta del Ministerio de Fomento. Esa respuesta tardó en llegar casi una década hasta que apareción publicada en 1921 como declaración de «Monumento Arquitectónico-Artístico». La siguiente podía ser una imagen de aquellos del estado de las zonas superiores de aquellos años.
En 1951 el Ayuntamiento de Almansa se encontraba ejecutando algunas obras menores cuyo objetivo era el de reforzar algunos de los muros y los torreones, a la par que dar algo de luestre al entorno con la plantación de pinos y la creación de caminos, paseos y accesos más adecaudos para las visitas. Sin embargo, en 1953 el Ministerio de Educación Nacional aprobó el Proyecto de Consolidación del archiconocido José Manuel González Valcárcel y ese mismo año la Dirección General de Bellas Artes comenzó dichas obras que se prolongarían en sucesivas tandas hasta 1972.
Más adelante, al comienzo de la década de los 90 se realizaron unas estructuras de consolidación del terreno en las laderas noroccidentales del Cerro del Águila a base de contrafuertes de hormigón armado anclados al terreno.
Cuando vislumbramos el castillo desde algún punto del interior de la localidad de Almansa, nos impresionan el perfil inconfundible de los merlones piramidales y la posición central de la torre del homenaje construida por Juan Pacheco en el siglo XV con sobria mampostería y estilo gótico. Cuando paseamos entre sus muros y recorremos los adarves y las rondas se nos cae el alma a los pies pues algunas de las zonas reconstruidas parecen una especie de opus modelado en la idea historicistade lo que fue antaño el volumen de las estructuras defensivas. Hay fragmentos de muros, almenas y
El Proyecto de Ejecución es a priori confuso porque está dividido en tres partes en las que sólo una pierde importancia en favor de las otras dos. Intentaremos resolver al final de este proceso la siguiente pregunta: ¿qué es anexo de qué, el proyecto de arqueología del de arquitectura o viceversa? Toda esta documentación está disponible para descarga en estos enlaces de la página web del Ayuntamiento de Almansa:
01. Memoria
02. Anexo geotécnico
03. Anexo arqueológico y de restauración
04. Estudio de seguridad y salud
05. Planos A
06. Planos B
07. Planos C
08. Pliego de cláusulas administrativas
Después de la visita del día 3/3 a Almansa:
Hemos vuelto de esta jornada de visita a Almansa con una extraña sensación. Durante la semana anterior ya se nos había puesto la mosca detrás de la oreja por algunas de las geometrías, sistemas y descripciones estudiadas. Sin embargo este proyecto que calificábamos de confuso es más que eso; es retorcido y agresivo para con un entorno que no creemos que puediera admitir más «intensidad expresiva».
De todas formas hay
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